Sinceridad ante todo

Demasiadas cosas para un sólo día me hacen pensar que a veces mi modo de hacer las cosas, más específicamente de decirlas hacen que la gente tenga una visión netamente errada de mí, de hecho es gracioso tratar de extrapolar las situaciones que ocurren día a día en mi alrededor. Llevo días llevando una vida distinta a 20 años que he vivido y no me arrepiento, es un proceso difícil de concretar pero que de a poco siento que puede cambiar, sobretodo lo que antes me molestaba y que ahora lo dejo más en claro, más limpio, más sincero, mucho más yo. Trato de mirar el espejo retrovisor para analizar en qué momento perdí el camino que pretendía recorrer, y estos días comprendí que dejé encargada mi felicidad a otras personas, y cuando me dí cuenta que podía hacerse tarde retrocedí y aquí estoy, con la frente en alto para levantarme frente a los desafíos que se puedan aparecer.
Reconozco que dejé de lado absolutamente unode los soportes con los que crecí durante años, no ha sido fácil, el querer buscar en un perfil de facebook o en otro blog se ha hecho latente, pero he sido fuerte, no he mirado nada, no quiero saber que está sucediendo. Y es que también aquí hay un poco de temor en la decisión de mirar lo que a veces puede no agradarnos, o la incertidumbre que a veces te embarga, el hecho de imaginar si pensará en tí, que estará sintiendo, si habrá alguna solución clara al tema inicial que radicó todo el problema. Yo hasta ahora no veía una solución, y por esó decidí caminar un paso hacia el lado arriesgándome a que quizás nunca habrá una respuesta de la otra parte, ni la más mínima, que talvéz hayan días en los que me muera por salir corriendo y abrazar esa silueta que reconocería aunque cruzara la Alameda en el paso de cebra más concurrido de la ciudad, pero no lo quiero hacer, porque las decisiones son para cumplirlas a cabalidad. Y ahora ese sentimiento de nuevo me invade, pero...¿Qué hacer? Si al final puede que yo sea la única que está pensando todo esto, y no sirva de mucho, lo más seguro es que no leas esto.


(Y no sé si importe mucho)